viernes, 23 de mayo de 2008

A juicio... los cuentos de Harold Kremer

El acusado

El asalto

—Te dije que le agarraras la pierna
—Me pateó.
—¡Agárrala! Si no se queda quieto le vuelvo a pegar.
—No entiende. No ves que es un bobo. Además no
sabe hablar.
—Claro que entiende. Mira.
—¡No le pegues más! Ya la tengo agarrada.
—Ahora… ¡Mierda! Se está orinando. ¡No te orines!
—¡No le pegues más! Déjalo que se orine.

—Pero no encima de mí. ¡Cochino!
—Vámonos, mejor vámonos. Ya se volvió a soltar.

—Espera voy por ese palo.
—No le pegues así. ¡Lo vas a matar!
—Le pego y le corto los huevos. De todos modos no los necesita.

—¿A qué huele?
—¡A mierda! Se está cagando.
—No le pegues más. Vámonos.
—Está bien.

—Huele a orines.
—Se meó en mis pantalones. Vamos a casa.
—Tengo que ir a la mía.
—¡Puta vida!

—¿Qué?
—Se nos olvido quitarle el dinero.
—¿Y cómo lo cogíamos si estaba untado de mierda?

Harold Kremer. El Combate. Deriva Ediciones. Cali, 2004. pp: 75-76


La defensa

1. Harold Kremer es un escritor Valluno, profesor universitario y director de talleres de creación literaria en Cali. Para mí, uno de los grandes cuentistas colombianos contemporáneos.
2. Varios de sus cuentos han sido incluidos en antologías nacionales e internacionales.

3. Es un cultor y gran conocedor del minicuento, como lo demuestra en El combate, de donde tomé El asalto, el cuento posteado arriba... No importa que huela a vamos a matar a los gaticos de Álvaro Cepeda Samudio (uno de mis cuentos favoritos).
4. He leído tres de sus libros de cuentos: El enano más fuerte del mundo (2004), El combate (2004) y La cajita cuadrada (2007). Independiente de su extensión, sus cuentos son concisos y claros: no les falta nada, pero sobretodo, no les sobra. En ocasiones juega con gran éxito entre la ambigüedad entre lo real y lo fantástico. Buena cosa.
5. Las ediciones de sus libros son muy bonitas. Las carátulas tienen una ilustración de Roland
Sabatier y están muy bien diseñadas. Los colores, el tamaño, la organización del texto al interior y la calidad del papel los hacen ver muy “coquetos”. Un muy buen trabajo de Deriva ediciones.
6. No tiene que ver con sus cuentos, pero sí con mis afectos: en parte a él (a un brevísimo y estimulante taller de crónica que dictó en Medellín en 2004 y a varias charlas, vía e-mail, que hemos tenido) yo escribo crónicas. Sin embargo, Harold reconoce que aunque nunca ha escrito una ni lo piensa hacer, el género facilita la creación en el trabajo de taller y es por sí mismo un género literario y no literatura menor, como lo asumen algunos.


La fiscalía

1. ¿Dónde diantres se pueden comprar? Ni idea. Supongo que en las librerías caleñas, porque aquí, en las de Medellín y Bogotá, en ninguna he visto un ejemplar. Ni siquiera en la sala de autores colombianos de la Lerner del centro… Mala cosa.
El enano más fuerte del mundo lo tengo porque se lo compré al autor en vivo y en directo, los otros dos me los ha regalado. A la final salieron ¡tres por el precio de uno!

Al parecer la única forma de conseguirlos en Bogotá es sacándolos de la Biblioteca Luis Ángel Arango porque en las de Biblored tampoco están.
2. Una de dos: o alguna editorial grandota lo reedita o la casera Deriva ediciones lo saca del closet, se pone pilas y lo mercadea.
A pesar de que dicen por ahí que los libros de cuentos no se venden, creo que tienen una gran oportunidad entre manos y no la han sabido aprovechar.



Veredicto

Si son capaces de encontrar algún ejemplar no duden en leerlo. Más allá de mis sesgos afectivos por un buen maestro, Harold Kremer es un gran cuentista.


Publiquese y cúmplase

5 comentarios:

Camilo Jiménez dijo...

He leído piezas por ahí desperdigadas, y también me gustan mucho. Mientras leía ya pensaba en preguntar acá que dónde los había conseguido el administrador del blog.

A proceso debería irse más bien la editorial Deriva, con semejantes perlas y teniéndolas por ahí escondidas. El autor hace rato está, más que "no culpable", declarado inocente y hasta condecorable. ¿Qué más tendrá en su catálogo Deriva? (Viéndolo bien, el nombre le queda que ni pintado.) Ay, editoriales, no distribuyen y después se quejan del escaso apoyo y de "la situación".

Anónimo dijo...

Muchos somos los que NO sabemos valorar a nuestros maestros. He decidido sacar del anonimato a Kremer, en un proyecto que implica a muchos jóvenes de Cali.

anuar bolaños dijo...

Que buena reseña de los trabajos de kremer.

anuar bolaños.

Anónimo dijo...

tanto com maestro como escritor es una de las grandes mentes que tiene nuetra literatura colombiana.

Anónimo dijo...

Bien bonita la reseña y el formato. Hoy nos visita en el taller de RELATA - PASTo, y gracias a este blog, pues hay muy buenas expectativas. Gracias por mantener vivo este canal.